Marmalade Boy| Miki & Yuu, la importancia de la comunicación


Chico Mermelada es uno de esos animes shoujo clásicos que alguna vez llegamos a ver y al que le tomamos cariño, especialmente por personajes como Yuu.
Sin embargo, al volver a verlo con otros ojos, podemos comprender muchas cosas que en su momento no notamos. Porque esta historia también nos enseña lo que no debemos permitir en una relación.
Por esta razón elegí a los protagonistas para abordar algunos puntos clave que reflejan su mala comunicación, y lo que podríamos evitar si estamos pasando por una situación similar:

1. Inseguridad
Cuando una chica se acercaba a Yuu, él no ponía límites claros. Eso provocaba que Miki no tuviera la confianza suficiente para saber qué hacía su novio cada vez que estaba con otra mujer. Por eso es tan importante que, en una relación amorosa, exista respeto y seguridad. Nadie debería vivir con ansiedad ni tristeza por estar con alguien. Una relación debe ser un lugar seguro, no una fuente de dudas constantes.

2. Distanciamiento
Cuando Yuu se va a estudiar al extranjero, ambos fallan en llegar a un acuerdo para enfrentar el primer gran obstáculo de su relación: la distancia. Miki casi siempre era quien lo buscaba, y eso genera desequilibrio. En una relación se debe considerar también cómo se siente la otra persona, y darse tiempo para compartir, expresar y entenderse. No podemos asumir que la otra persona sabe lo que sentimos; si no lo decimos, lo más probable es que se generen malentendidos.

3. Falta de comunicación en los conflictos
A veces, por miedo, evitamos decir lo que sentimos y huimos de la realidad. Pero guardar silencio solo empeora las cosas. Es esencial aprender a escuchar, tener empatía y hablar desde el respeto. Una ruptura no siempre es la solución; muchas veces es necesario reconocer lo que está mal, y comprometerse a cambiar y crecer juntos.
4. “Un clavo saca otro clavo”
Tras su segunda ruptura, Miki termina la relación con Yuu porque se siente inestable por la falta de comunicación a distancia. Sin embargo, en lugar de vivir su duelo, lo evade buscando rápidamente a otra persona para no sentir la pérdida. Pero es importante primero escucharse a uno mismo y sanar. De lo contrario, terminamos lastimando a la otra persona… y también a nosotros mismos.

Porque al final, Chico Mermelada no solo es una historia de amor juvenil, sino un recordatorio de que una relación sana se construye con respeto, comunicación y empatía.
Y aunque duela, también nos muestra que a veces, para amar de verdad, primero tenemos que aprender a amarnos a nosotros mismos.

Diana Belen

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Instagram